UNA NOCHE CASUAL

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UNA NOCHE CASUAL


Lentamente se acercó
y mi cuello por la espalda besó
era una noche de luna llena
no dije nada
giré mi cuerpo hacia el
su mirada me cautivó,
era un ser perfecto
mis manos
recorrieron su torso desnudo
y el fue quitando mis ropas muy lento
en silencio, comenzamos a besarnos ,
sobraban las palabras
y poco a poco entre nosotros,
se fueron mezclando los deseos
y nos cubrimos de besos
piel con piel, alma con alma
no importaba nada,
solo eramos nosotros, el y yo
fue una sublime noche de placer
una noche
en la que nos entregamos
sin reservas, con ansia,
nos amamos hasta quedar extasiados, 

solo un momento estuvimos entrelazados, 

abrazados,
después lentamente el me apartó
y a los ojos me miró
y una leve sonrisa a mi dirigió
mis labios besó
y en silencio de la cama se levantó, 

vistiendo su cuerpo
sin voltear a verme
del cuarto salió
ni siquiera se despidió,
yo quedé ahí sin decir nada,
sabía
que ese sería
un encuentro casual
no nos conocíamos,
cuando nos vimos en el barde ese hotel
solo las miradas cruzamos
y un rato estuvimos mirándonos 

después yo me levanté
y sin decir nada
con la mirada a seguirme lo invité , 

llegue al cuarto
y la puerta entreabierta dejé
sabía que el por ahí entraría,
no lo conocía,
esta noche vivida
quedará en mi recuerdo
pues sin conocernos él y yo,
no tuvimos solo sexo
nos amamos sin condición
porque lo que esa noche sentimos
no sólo fue atracción
en ese momento
el amor estuvo ahí
y a los dos nos abrazó.


Lupita Molina de Hoyos
México
24/02 /2016
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04/03/2016